Quizás muchos se han detenido a leer este artículo por el solo hecho de mezclar dos cosas, que en exceso, algunos mojigatos consideran tóxicas. Es decir, sexo y marihuana. En estos días, me he tomado el tiempo de leer un poco al respecto. A pesar que me suena interesante, (es rico como describen las sensaciones), yo en lo particular no soy amiga de ningún tipo de droga. A no ser claro, del café.
Quise escribir de manera reflexiva si sería capaz de probarlo o no. Bueno, por el bien de la ciencia, estaría más que justificada mi acción. Siempre y cuando realmente se lleve un registro de los efectos secundarios. Tanto los beneficiosos, como los que no lo son.
Para ser sincera, a veces creo incluso que soy hasta algo cursi. Crecí con una familia donde el sexo era un tabú. No se conversaba libremente de las relaciones sexuales, ni de nada relacionado al tema. Obvio que con respecto a drogas menos. Eso no solo era un tema prohibido de tocar, sino que además su consumo no se justificaba bajo ninguna circunstancia.
¿Qué dice ‘la ciencia’?
Según diversos estudios, se ha determinado que el consumo de marihuana no es que prolonga las relaciones sexuales. Sino que intensifica el calor del momento. Los orgasmos pueden ser más duraderos. El placer se incrementa debido a que las contracciones vaginales, en algunos casos, son menos frecuentes. Mientras que la tensión, en lugar de ir disminuyendo, aumenta y se mantiene fuerte.
Lo del sexo y marihuana no es nada nuevo
Se habla de la vinculación del sexo y marihuana desde la antigûedad. Como todo en la vida, tiene sus pros y sus contras. Pero a ciencia cierta lo que muchos mantienen es, que no hay droga más erótica que esta. (¿Esto que quiere decir? No sé).
Dentro la medicina tradicional India, se receta el cannabis como afrodisíaco. Porque no solamente es capaz de aumentar el tiempo de una erección en el caso de los caballeros. Sino que además propicia la desinhibición, amplifica las sensaciones y el deseo. Haciendo vulgarmente que el calor que emana de tu cuerpo debe ser apagado por una buena ‘manguera’.
Eso sí, el combo debe ser completo. Hablo de mi caso, por si en algún momento me da por volverme loca. Debe ir de la mano con una pareja que de verdad te atraiga y te caliente. Solo así me animaría a dar una probadita de esto, a ver si es que a una le pica más todo por dentro.
¿Para satisfacer a ‘tu macho’?
Ahora bien, también cabe acotar que en algunos sitios de internet hablan del uso del cannabis en el sexo para “satisfacer a los hombres”. Es decir, ya sean maridos, novios, amantes o quien te obligan, según la religión a tener como pareja.
En este caso, aclaro, no soy feminista ni feminazi como les dicen ahora. Pero, ¿por qué yo voy exponerme a un consumo para satisfacer a un varón?. Aquí pienso que debe ser una satisfacción mutua, relación ganar- ganar. Sino, no vale la pena.
Con calma
Los efectos relajantes del cannabis hacen que las personas disfruten con mayor detalle el sexo. Sin ir apurados a la sensación final de éxtasis. Disfrutan el momento estableciendo una mayor comunicación con la pareja (o las parejas). Ya en este punto depende de los gustos de cada quien. (Esto si me da curiosidad: varios. Ahora lo que no sé es si mezclados o uno por uno. Me dio hasta calor pensarlo. Pero me estoy desviando del tema).
Los Contras del uso del cannabis
Así como ha muchos les da curiosidad probar, deben saber antes de hacerlo ciertos detalles que debe cuidar para que no caer en conflictos internos. En el caso de los hombres, su consumo excesivo puede ocasionar lo contrario a una rica y duradera relación sexual: una disfunción eréctil. Bajo rendimiento sexual debido a la mala calidad espermática y también déficit de testosterona.
En el caso de nosotras las mujeres, pudiese producir mucha sequedad vaginal. Es por eso que hay que ser sumamente cuidadoso con su uso. Hasta estuve investigando que debido al efecto desinhibidor y relajante puede provocar conductas muy permisivas, permitiendo un ‘todos con todos’ y hasta sin condones, en algunos casos. Así que a disfrutar pero ‘con calma y cordura’. Como siempre decimos aquí en Santubear: responsabilidad ante todo.
Aquí quizás sería un interesante todos con todos, digo por aquellos de verlos de todos tamaños y colores, asi estilo ‘golosa’. Pero hay que cuidarse. No protegerse puede representar quedar en estado o algo peor, contagiarse de una enfermedad de transmisión sexual.
Bueno, quise hacer un poco ‘folklórico’ el tema. Pero lo cierto ahora si, para ser serias, es que siempre siempre antes de probar cosas nuevas debemos investigar bien sobre ellas y saber a qué nos exponemos.
Deja una respuesta